sábado, 4 de diciembre de 2021

Dale demasiado poder y tendrás un esclavo

Cuando le preguntas a un niño al que le han intoxicado qué es la dignidad, o qué es el prestigio, tal vez te diga algo cercano a "que no te pillen", "que no puedan decirte nada" o, simplemente, "poder hacer lo que quieras". Quizá el desprecio que se le tiene a la infancia implica el simplificar los modelos resentidos hacia ellos, ofrecerles una manera simplista de ver el mundo, hacerles creer que las cosas malas hay que replicarlas para que el mundo siga siendo mundo.

La lógica que hay detrás de una buena crianza, la buena pedagogía, exige ofrecerles a los niños una definición correcta de lo que es la democracia. Es decir, no se trata de darles la propaganda propia del sistema económico escogido, y toda su ideología, sino más bien de ofrecer la filosofía que se esconde detrás del pacto social, lo que hace que los individuos se vuelvan civilizados. Y, dicho así, parecería una tarea utópica o, peor aún, que al final se acabaría por meter proyecciones y asuntos turbios igualmente.

Sin embargo, como pasa con todo en la vida, sólo hay que pararse a hablar, sentarse delante de la mesa redonda y observar cómo algunos ofrecen una manera de sortear el problema de la ideología, de los problemas psicológicos de resentimientos y frivolidades, para ofrecer mecanismos consensuados de una moralidad trascendente. Los hay que no están acostumbrados a formar parte de mesas de ningún tipo, y se vuelven pesimistas a la hora de escuchar fórmulas que nos ayuden a entrar en entresijos que trasciendan a nuestro propio comportamiento. Pero, como pasa con todo, tal vez la clave está en encontrar la palabra, y a partir de la palabra dar con la lógica que desenvuelve todo el marco.

La palabra puede ser una frase, pero no debe existir ningún homónimo que confunda la idea; debe asociarse a un significado unívoco. Es decir, una vez propuesta la palabra, acto seguido, se debe profundizar en su significado único, y que sea compatible con los postulados éticos que se pretenden. Es decir, se debe partir de una palabra y, a partir de ella, el vínculo lógico que desarrolle toda la revolución debe incorporar una participación por parte de los que quieren confeccionar el mundo deseado.

Asímismo, diré que la palabra podría ser dignidad, y que su significado debe rondar sobre qué es lo que hace que las personas te hagan caso ¿Te hacen caso por miedo? ¿Qué significa el poder cuando no hay dignidad en el cargo? ¿Es factible algo así? Cuando se le otorga demasiado poder a una persona la pregunta se hace necesaria: ¿por qué tanta responsabilidad en uno solo? ¿Qué se pretende por ello?

Y eso es lo que nos lleva al verdadero significado del poder: cuando localizas a un poderoso es fácil hablarle para que se sienta obligado a actuar con alguna clase de responsabilidad. Sólo hay que clasificar la clase de responsabilidad bajo la cual se ata: la responsabilidad del poderoso son los grilletes del tonto. Al fin y al cabo, ¿qué tipo de poder tiene? Si es democrático no necesita ningún tipo de reconocimiento más allá de los propios méritos, pero si el esquema no es meritocrático entonces observaremos una pelea encarnizada por pretender demostrar o jugar con el título que le fue otorgado. Cada cual puede llegar a tener su propia tontuna y, con ella, su debilidad.

El que se maneja con la gestión del valor de las cosas es quien equilibra la balanza de lo que tiene valor y lo que no. Si el poder que se tiene es económico entonces habrá unos señores que le darán valor financiero a tus recursos. Si el poder que se tiene es legal entonces habrá unos señores que le darán valor moral a tus leyes. Si el poder que se tiene es militar entonces habrá unos señores que le darán valor legítimo a tus decisiones. Pero claro, ¿qué pasa cuando encontramos a un señor que pretende convertirse en su propio financiador? ¿Qué ocurre cuando la legitimidad proviene de ti mismo como pasaba con los zares o los califas?

En Rusia los zares no duraban demasiado, inspiraban a la anarquía y a las traiciones. Si comparamos la historia de España con la historia de Rusia observamos dos modelos de reyes que no tienen en absoluto nada que ver ni por asomo. Los reyes españoles tenían a la iglesia y a los vasayos haciéndoles oposición ya sea en el campo de la moral o en el campo de lo económico. Sin ir más lejos, cuando el rey podía disponer de los burgueses para obtener sus propios tributos aún los burgueses podían oponerse a los reyes a la hora de reclamar más espacio para evolucionar sus negocios.

En Rusia, y que un historiador me clave estacas si me equivoco, el zar no respondía a vasayos o burgueses. El zar era la máxima representación moral y territorial. Por eso mismo su posición estaba muy limitada a qué podía hacer en cada momento y, si no lo hacía, simplemente podía ser asesinado.

Cuando Isabel la católica creó la idea de imperio se basó en el imperio romano, nada que ver con la idea de imperio de Stalin: una aberración puesta por escrito que debería de enseñarse en las escuelas para saber qué es lo que se entiende por una dictadura - la unificación de la cultura y la centralización de la moral. Al final Stalin creía que debía hacerse un gabinete de concentración para..., ¿aunar el pacto social? Sin plan no hay argumento.

Te creas tu palacio, te creas la cárcel. Y más te vale no tener familia, porque sabes que irán a por ellos. Y si les favoreces te odiarán más por el nepotismo. Y si les das igualdad de oportunidades difícilmente podrás mantener tu sistema corrupto. Eso es lo que pasa en las empresas, que son una clara expresión de la incongruencia del liberalismo: así cuando la hija de Ortega hereda el puesto el liberal tiene la "obligación" de fingir que es por meritocracia. Mi respuesta: no somos idiotas. Todos nos hemos dado cuenta de que hay mujeres y hombres más preparados que su hija, y que habrán recibido mucha menos inversión en esa preparación, y que serán de más confianza a la hora de defender un modelo de negocio que es más que probable que conozcan mejor. Pero quien es colocado es quien es colocado.

Los grilletes del hijo no son los mismos que los grilletes del padre, y observaremos los distintos tipos de problemas y debilidades tanto en unos como otros.

Cuando le das demasiado poder a alguien esta persona de repente descubre que está rodeada por personas que ya no le miran igual. Y automáticamente debe de empezar a comportarse como debe. Si renuncia a ese poder se libera. Si sabe administrar sabiamente su renuncia entonces se convertirá en el emperador: aquel que ha encontrado su trono. La esfera del emperador es la de aquel que sabe dónde están los egoísmos y la racionalidad; poco importa lo que se piense sobre el emperador, sabemos que el patriarcado es malo porque discrimina por razón de sexo, la cosa es tener un emperador al que le otorgamos el puesto por motivos meritocráticos - sin discriminarlo por razón de sexo, raza, familia, etc...

Sin embargo, insisto en que la historia nos enseña cómo mantener un imperio constructivo: el imperio español canonizaba a sus gentes, sí, pero al menos lo hacía en base a unas ideas que le eran ajenas a los reyes - lo hacían en nombre del Vaticano. Por lo que había un árbitro extranjero que fiscalizaba tales decisiones. Esto era impensable para Stalin.

De la misma manera, cuando mienten sobre la homofobia del Che siempre suelen olvidar que éste se movía según los esquemas de la medicina moderna de entonces; si la homosexualidad era una enfermedad un buen científico deberá tomar las medidas más humanas para tratarla. Así hasta que la comunidad científica fiscalice otros métodos. Y es que hay que saber distinguir qué actos son dignos de denuncia y cuáles no.

Un ejemplo lo tenemos en Spinoza y las mujeres, ¿es correcto tratarlo de misógino? En el caso de Spinoza quizá suenen rancias sus opiniones sobre las mujeres, pero no afecta al resto de la obra. Donde sí empudrece al filósofo es en Hegel, sus reflexiones sobre las mujeres no son más que meras proyecciones que emite contra sí mismo y su propia obra. Es decir, he oído decir que Hegel sí es reciclable, pero allá donde leo sólo veo basura - es lo que pasa cuando tratamos con un sujeto cuya ética está podrida. Dependiendo del tiempo que se vive tenemos a un pensador o a todo lo contrario. Cuando todo el mundo fiscaliza una opinión, parece que trasciende el error y debemos aceptar el silencio contra la verdad. Pero cuando la mayoría demuestra que la fiscalización va en una dirección bien definida, entonces toca aceptar que ser reaccionario puede empudrecer todos tus esquemas (si es que realmente eran sistémicos, porque de no serlos al menos debían tener una evolución de progreso - en cualquier caso no interesa ni ser sistémicamente reaccionario ni progresar hacia lo reaccionario, insisto: es basura).

Lo único que extraes de una basura de filósofo son citas sueltas y falta de coherencia. Por tanto es imposible esperar demasiada profundidad, o una escuela que trascienda al uso de según qué términos que, de usarse, seguro que machacan al autor genuino. Reducir la historia de la filosofía a un problema de etimología es, una vez más, más basura. Por eso hace falta comprender cómo se evalúa la historia y evitar el que se convierta en un error.

Me imagino al ser humano que descubre que no tiene a ningún par que le sancione. Se convierte en el ser humano más solitario del planeta. Me imagino encontrar a un hombre al que le catalogan como la criatura más perfecta, y que no haya nadie que le cuestione nada en absoluto. Entonces el sujeto está destinado a ser sacrificado al dios volcán para que no erupcione. Y eso es debido a que desde el punto de vista de una hormiga un hombre mide lo mismo que un elefante.


viernes, 3 de diciembre de 2021

No serás votado. Relato

Todos los periodistas esperaban el anuncio por el que se aprobaría la ley para el día de mañana. Por esa razón el periodismo oficial acordó una reunión urgente con el Gobernante Vigente. El Gobernante no podía rehusar al formalismo, pero como le incomodaba entrar en detalles procedió a acercarse a los micrófonos deleitándose con las pausas y las poses necesarias para que los fotógrafos tuvieran su encuadre.

- Heme aquí. Preguntad.

Y dicho esto, sin más dilación ni presentación posible, todos los periodistas oficiales levantaron la mano y, por el fondo, algún que otro becario. Entre murmullos se fue dando un turno de palabra:

- ¿Cree Vd. que la orden ejecutiva es legal? ¿No teme que se la tumben?

- Es perfectamente legal. De no serlo no habría sido en absoluto polémica.

- ¿No teme que se promulgue una ley para derrogarla desde el Parlamento?

- Para que el Parlamento haga tal cosa tendrá que pasar un tiempo, y conseguir un consenso que en estos momentos no tiene.

- ¿No teme ser destituido en los próximos días por no renovarse su confianza?

- De ser así la orden seguirá vigente. Así que no me preocupa. Todo lo que tenía que hacer ya está hecho.

- ¿No tiene miedo de que le acusen de conspiración o prevaricación?

- Como ya he dicho la orden es legal.

- ¿Podría explicar sus motivaciones en palabras que entienda el Pueblo?

- Acabar con el clientelismo.

Los murmullos se fueron disparando tanto como las poses del presidente. Era difícil saber qué podían tener en mente los periodistas, si realmente era una broma, si se había vuelto loco o qué estaba sucediendo. Así que, de motu propio, volvió a dirigirse a los micrófonos.

- Hay veces en la vida en el que la sociedad tiene que vivir un cambio que provoque que no se pueda volver atrás. Y esto se produce porque la manera en la que el estado se ha estado comportando puede que no fuera todo lo elegante que debiera.

- ¿Qué quiere decir con elegante? ¿Cree que los jueces aplicarán su orden?

- Más les vale. La inoperatividad de las medidas cautelares activa las alarmas militares.

- ¿Qué pasará con los que cometieron delito hace más de veinte años? ¿Habrá perdón u olvido?

- No me corresponderá a mí. Ya digo que si un policía los detiene y el juez no aplica la normativa vigente entonces el poder militar se hará cargo.

- ¿Se incorpora entre la anulación los indultos por salir en una procesión de Semana Santa?

- ¡Por supuesto!

- ¿Y las doctrinas que hacían firmes las sentencias que exoneraban casos particulares?

- Eso no corresponde a mis competencias. Para anular el indulto antes hay que ser condenado.

- ¿Y si se trata de un aforado? ¿Prevalece la orden o el fuero?

- Prevalece la orden, porque el fuero fue pensado para nuevas acusaciones, no para una condena por cumplir.

- ¿Y si se recurre la orden?

- Si se recurre la orden tendrá que explicar el Supremo cómo el que es culpable para él no tiene que cumplir su condena íntegra ¿Acaso tiene competencias el poder judicial sobre los indultos? Si no es así, entonces tampoco la tiene para la anulación de los mismos.

- ¿Ha pensado que irán a por usted?

- Ya sé que no volveré a ser votado. Esto lo hago...

- No me ha entendido. Irán a por usted.

- Esto lo hago porque no tengo nada que perder. Y todos tenemos mucho que ganar.

- ¿Cuál es el mensaje que le da a todos los ciudadanos que recibieron en un momento dado su indulto y que ya están reinsertados en la sociedad y son ciudadanos de a bien?

- Que teman por cada minuto que pase, por cada segundo. Porque puede que ese policía que se pase por delante de ellos no les detenga, pero puede que el siguiente sí lo haga. Y que recen conque el juez encuentre excusas variopintas para que no sea el blanco de la ira del poder militar.

La revolución es confeccionable

Esta noche ha sido una de esas noches en las que me siento defraudado con cómo se ha comportado mi cuerpo. Igual que ayer dormía como un lirón, esta noche ha sido recordar las aberraciones vividas para que tenga que revivirlas, sentirlas de nuevo atravesando mi cuerpo... Es como un fantasma que no encuentra descanso, el descanso que no encontrará mientras siga viviendo esta falsedad.

Cuando se vive en auténtica parsimonia con la realidad los malos recuerdos se queman como resultado del triunfo material frente al desamparo. Mirar desde arriba las injusticias es posible. Lo que no se podrá hacer desde arriba es mirar las propias injusticias, aquellas de las que uno es responsable. Esos fantasmas tienen otro cuerpo, otro color, otra forma... Algo así llegué a sentir una vez: sudores fríos por haber aseverado algo que descubrí que no era verdad, porque muchos me habían tomado en alta estima habiéndome equivocado. Pero ya digo: no es lo mismo el remordimiento que el resentimiento.

Algunos malos filósofos han querido apartar ya sea el remordimiento como el resentimiento de las ecuaciones del ser humano. Obviamente no entienden cómo trabaja la humanidad, son unos sociópatas empedernidos por ignorar elementos tan fundamentales del ser humano. Pero ése es el papel de aquellos que quieren revolucionar la definición de ser humano: intentan confeccionar las herramientas de las que nos valemos para que no sean tomadas en cuenta.

Si se elimina de la ecuación los remordimientos entonces seremos sus esclavos, así como si eliminamos el resentimiento como algo propio de la naturaleza humana. Resentir significa que fuimos testigos de una injusticia no reparada, y el no poder demandarla provocará nuevas injusticias..., hará imposible el pacto social. Digamos que si te echan en cara tus denuncias como si fueran destructivas lo único que se conseguirá es provocar o la destrucción del sistema o la destrucción de la humanidad. Y en eso consiste eso de confeccionar la revolución: se trata de definir al ser humano, de decidir en qué se va a convertir.

Más le vale a esos que conforman la literatura de lo ético que tengan un cierto control, porque de lo contrario se le echará el mundo encima y no sabrán lo que ha pasado. Pandemia incluida.

jueves, 2 de diciembre de 2021

Socialdemocracia para tontos V1.0

Estaba pensando en subir estos planteamientos por Youtube, que tengo más audiencia, pero como los vídeos tardan lo suyo en subirse... Esto es más cómodo. Y es que aún no sé lo que significa desahogarse de esta manera: escribir es bueno para la psicología, eliminar los fantasmas que te acosan es un alivio. Y en ocasiones estas impurezas que me atosigan me parecen muy llamativas.

También tenía pensado hacer un vídeo sobre la maldad; en esta ocasión la tenía bien cogida por los distintos frentes - la tengo bien clasificada por sus cuatro filosofías. Y es aplicable con la teoría de los memes antropomórficos que vengo desarrollando en el otro blog, el de mi novela. Quizá los llame "esferas" como se traduce de la obra de Propp, decir arcontes ha provocado reticencias, y no es inteligente promover una palabra que algunos catalogarían como new age.

Memes autogenerados divididos en: funciones de lenguaje, esferas e instrumentos.

Pero a lo que iba..., muchos se preguntarán qué es lo que ha hecho que la socialdemocracia "funcionara". Vemos otras fórmulas que se han intentado: algunas más liberales y otras más planificadoras. Y parece que hay cierta tendencia a un punto como medio... Ese punto medio, por supuesto, es un espejismo, porque en cada país lo que es un punto medio más a la derecha en otros es más a la izquierda. Y más de uno podría pensar que es a eso a lo que se le llama "soberanía", o costumbres. Otro espejismo si se estudia con severa profundidad.

 Pero no quería dar ahora las herramientas necesarias para romper con las barreras marcadas por el espejismo generado por la socialdemocracia. De antemano, la paz social no se puede mercantilizar, y los medios de comunicación no deberían de ser sometidos por las élites financieras, que son las que promueven a unos partidos o a otros. La fluctuación de poder bipartidista supone una ventaja para quienes gustan de manipular la economía a partir de sus cábalas personales. Es demasiado evidente que el modelo socialdemócrata es terriblemente fácil de mejorar, trivialmente fácil de cuestionar y es insultantemente sencillo de listar una buena cantidad de cambios revolucionarios de sentido común. Así que cada vez que alguien dice que la socialdemocracia es el modelo menos malo yo veo a un tonto; o si veo que lo que dicen es que la democracia es el modelo menos malo (cuando en realidad es el único modelo posible) yo veo a alguien que aspira a ser tonto.

Vamos al tema. Observamos en la socialdemocracia unipersonal de Franco cómo, a pesar de ser una clara dictadura, había unas mayorías consolidadas que no eran cuestionadas del poder. Los derechos sociales que disfrutaban los trabajadores se podían hacer tangibles, y es que el gobierno franquista se identificó por el enorme miedo que tenía de que el Pueblo se revolviera, de que hubiera más sangre por las calles, de los piquetes... Así que se les otorgó un enorme poder de negociación, basado en el miedo. Siempre basado en el miedo.

Hoy día el miedo sigue existiendo, pero no desde los sindicatos contra los del poder, sino contra los trabajadores. El modelo actual mantiene el miedo poniendo contentos a los funcionarios contra los usuarios. Así, la justicia no persigue al funcionario ni al alto cargo, se vuelve el sistema muy tecnocrático, y esa es una forma normal de la evolución socialdemócrata. Se trata de la dictadura institucionalista: cuando los funcionarios son los que imponen lo que hacen y desean hacer, al margen de un laberinto de leyes que se interpretan sobre la marcha fingiendo que hay un experto que las cita.

No es de extrañar que la siguiente evolución a toda socialdemocracia personalista es una tecnocracia y, de la tecnocracia, a una idiocracia...

Ahora bien, no hay más que analizar por qué suena tan convincente. Éste será el clásico discurso de V de vendetta en la tele: la gente se ha acostumbrado al miedo, y lo usa para ir contra el chivo expiatorio, el enemigo. El Gran Hermano nos protege. 

Podemos observar las autolimitaciones en cosas muy simples, y es la figura del inspector o del auditor. Hay quien defiende posturas que no construyen, sino que más bien son mecanismos para evitar sus miedos, para huir de ellos sin afrontarlos: les da miedo que alguien sancione lo que hacen, quizá principalmente porque hay demasiadas normas, porque no hay manera de denunciar los abusos, porque la Justicia de lo Contencioso no es autoritaria... Esas son las claves de la socialdemocracia tal como la conocemos: el miedo y las injusticias.

Cuando se lanza la pregunta: ¿debería el Estado de diseñar una programación de Historia? Se observan respuestas muy diversas, muy propias de la socialdemocracia, llenas de un enorme miedo, un pavor inquietante y que siempre, siempre, siempre me infunde una enorme pena. La pregunta no es un dilema, es un falso dilema. Y es falso porque la respuesta no tiene más remedio que ser que sí. Y tenemos diversas variaciones: historia de la filosofía, historia de la literatura, historia del arte, etc...

No hay más que analizar en este falso debate cómo argumenta el que defiende que no, que es "otro" el que debe encargarse de la programación ¿Quién es el "otro"?

a) Los padres. Los papás tienen que encargarse de decirle a los profesores qué se entiende por la historia. Cómo se enseña, porque la historia es muy elucubrante y provoca una crianza muy manipuladora. Y yo les preguntaría: ¿cómo acceden los padres a la asignatura y obligan a que toda el aula cambie su programación? ¿Esto es aplicable en institutos? ¿En una universidad puede el alumno hacer cambiar la programación al profesor?

b) Los profesores a título individual. Hay libertad de cátedra y la historia se enseña como a cada cual le salga del pijo. Niños y adultos tienen que tragar con lo que le diga el funcionario de turno, que por algo le pagan. Y si se comete una ilegalidad, pues ya se le denunciará. Pero que a nadie se le ocurra meter inspectores en las aulas, que eso coharta la libertad de cátedra. Y yo a estos siempre les digo lo mismo: que no tienen ni puta idea de lo que es la libertad de cátedra. Se mueven por el miedo y no están dispuestos a dejar que unos profesionales se encarguen de crear una programación, profesionales que podrían ser elegidos por ellos mismos... Pero por qué, porque entonces sería el Estado el que se encargue, y eso es lo que no quieren.

c) Los políticos deberían de decidirlo. El Gobierno es el que se encarga. Hemos votado para que unos señores hagan ese cometido. Ellos decidirán a quiénes colocar para que cobren por tomar las decisiones por nosotros. El comité encargado será formado por señores que siempre han hablado bien de los partidos y habrá ayudado a la propaganda socialdemócrata, que es justo lo que necesitamos para que preparen la programación de las asignaturas de historia. Y yo a estas personas les preguntaría: Sois unos hijos de puta, ¿verdad?

d) Que lo decida la Comunidad Internacional. Yo a estos les diría: menos utopías, que no tenéis ni una leve idea de lo que decís.

En definitiva, el éxito de la socialdemocracia consiste en darle participación a todos sobre un debate para darles la creencia de que esa participación afecta al día a día, que conforma la cultura democrática. Y esa participación está llena de miedos: se vota por un miedo egoísta, a lo que le conviene cada uno. Y eso no es democracia: la gente debería de participar en lo que nos conviene a todos, pensar por el colectivo, no a título individual. A título individual sólo restan los intereses, y el pago del voto nos lleva a la tecnocracia y, de ahí, a un proceso donde cada vez hayan más leyes, más especialización y más idiotas al poder. Es un modelo autodestructivo en cuanto pase el tiempo suficiente o la población sea demasiado numerosa.

En cualquier caso, la socialdemocracia tiene la solución imperial: si todos están más o menos satisfechos con la mentira, si hay una propaganda continua de llamar democracia a la socialdemocracia, si se reprende al que cuestiona los conceptos, si se recompensa los movimientos reaccionarios, si se confunde el debate con falsos dilemas de izquierda y derecha, si compensa financiar a un partido político para conseguir tus propios intereses, si es posible raptar a los medios de comunicación... Al final obtenemos un modelo estable, y quien diga que la estabilidad es signo de paz social no es más que un idiota.



martes, 30 de noviembre de 2021

El agobio

¿De dónde viene la sensación de agobio? ¿Es una forma de ansiedad? Quizá sea resultado de un cúmulo de vivencias y de tener plena jactancia para poder llevarlas a cabo y, al mismo tiempo, no tener ganas o razones para ello. Quizá el agobio es la ansiedad del amo de casa, puesto que pueden ser muchas las cosas por hacer, todas en principio simples, y al mismo tiempo podría darse el caso de no querer hacer ninguna. Es como sentirse atrapado en una extraña cárcel.

Me imagino de dónde puede venir el agobio, y cómo acabar con él. Es simple: no he tenido unas vacaciones en condiciones desde hace años. Trabajo los siete días de la semana y cubro unas 80 horas semanales en la más absurda de las soledades. Lo normal es sentirse como..., acongojado, o algo. Pero claro, puedo disponer de ventanas al cine, multimedia..., la puerta que te abre Internet. Además de la promesa de poder salir adonde quiera, o al menos en principio, porque tengo medios para ello.

Pero, aún así, este año mis vacaciones fueron tener medio día libre - nada más. Mi idea de descansar es quedarme viendo una película sin ánimo de hacer nada más. Y no sé tampoco si funciona o no funciona, pero de vez en cuando aparezco con una nueva tecnología del copón. Así que muy mal no lo hago. Quizá en el día de mañana encuentre un lugar de trabajo en condiciones, y entonces volveré a ser como veinte veces más prolífico; es decir, que me vea arropado para crear, en vez de que me dé la impresión de que no servirá de nada.

Me pregunto si alguien como yo tiene legitimidad para tener agobio. Quizá para mañana pruebe a desconectarme de "todo". Así podría terminar de hacer el código tal como lo tengo estimado y empezar a desarrollar la semántica vinculada con las emociones. Debería de sentir pasión por ello..., pero no. Sé que estoy tremendamente aventajado, y que probablemente demore la creación de código por más tiempo para ver si encuentro las referencias que necesito de los filólogos estructuralistas. Si quiero programar lo que pretendo necesito completar un poco mis estudios - hay términos que no me enseñaron en Lengua y la teoría X de Chomsky tampoco me ofrece una terminología completa. Pero tampoco quiero dármelas de haber descubierto algo nuevo, puede que alguien ya hubiera hecho algo por el estilo..., sólo que yo lo desconozco al completo.

Por la mañana con un frío espantoso, y ahora el sol me está agobiando - por lo que me he tenido que quitar el jersey. Tan pronto como tengo muestras de congelación en mis manos y necesitaba ponerme guantes ahora el sol es puro agobio ¡Bonita época me ha tocado vivir! ¿Viviré el apocalipsis de la percepción mundial de lo necios que han sido? Hasta que no asuman lo de la pandemia casi que mejor que no me salgo del país - aunque a lo mejor encuentro destinos con más..., sentido común. Menos agobiantes.

lunes, 29 de noviembre de 2021

La voz y la coz

- ¿Quién eres?

Te has acercado hasta aquí y me lo preguntas ¿Que quién soy? Sólo sabrás de mí a través de ti, tú eres el vástago que nunca conoceré. Eres el resultado de una conversación que jamás tendré con nadie. Poco importa saber quién soy yo, porque sólo soy el receptor de esa conversación. Fíjate quién es el que habla, porque te verás reflejado en estas palabras y, poco a poco, podrás reconocer la voz.

- No puedo reconocer tu voz.

Antes de nada, ¿qué es la voz? ¡Cuántas veces me lo preguntaron y tantas respuestas habré dado! Muchas de ellas bastante satisfactorias para quien preguntaba. Y es que puedes dirigirte a una persona e intentar ser convincente, dicen que eso es tener voz..., obviamente ser convincente es importante. La voz es la función poética, es el carácter lírico que tiene un comunicado que no tiene porqué ser poesía. En ocasiones la voz exige una imagen, una puesta en escena, una llamada a la presencia.

- ¿Cómo puedo hacer acto de presencia?

Lo primero es distinguir el poner la voz de lo que es dar una coz. Y para ello hay que pararse para mirar el paisaje, y descubrir lo extraordinario dentro de lo ordinario. La coz se da cuando se intenta devolver a lo ordinario lo que ya es extraordinario.

He conocido burros de muchos tipos, rebuznaban felices en sus prados y marcaban una huella que era seguida por muchos. Formaban manadas fascinantemente gigantescas, y pastaban por los verdes prados que les ofrecía su libertad. El sonido del burro, cuando grita en manada se traduce en un lamento de intento de hacer algo con su vida. Si el burro hubiera nacido mudo muchas personas habrían creído en Dios.

Pero en ocasiones emite rebuznos, relinchos que nunca aspirarán a ser como los de un caballo, graznidos que no se carcajean como lo haría una garza. Por mucho que ruja el burro jamás sonará tétrico o tenebroso, ni reinará en los ecos de las montañas por sus aullidos, porque no espantará a ningún lobo estepario por ello. Cuando el burro se expresa es para reconocer que lo suyo no fue otra cosa salvo el grito del miedo personal, de la dependencia del rebaño, de la llamada de atención para ser protegido.

El burro no tiene voz para expresar una emoción. No es como cuando el lobo encuentra la luna y decide romper los sonidos de los grillos. 

- ¿Qué luna?

¡Mírala! No hay nada más normal como lo que es extraordinario para alguien. Eso es lo primero que debes hacer. El lobo encuentra en la luna el regalo que le ofrece a quien se ubica bajo ella. El lobo anuncia son su aullido qué es lo que místicamente se eleva. Y lo que está allá a lo alto no es más que el misterio mismo de lo que entendemos por belleza. Se aulla por el silencio de los grillos al respetar ese lamento, y por cómo la noche te acompaña con la mirada peregrina de quien se sabe especial.

- Cuando contemplo la luna recuerdo de la noche los animales agazapados, esperando la oportunidad a tirarse sobre mí.

Entre matas y matorrales, algunos animales diurnos se vuelven taciturnos e intentan atrapar lo que no cazaron por el día. En una montaña poco pinta el oso cavernario si el frío ya está llegando, pero de vez en cuando ruge el lamento por el miedo a morir de hambre. Es entonces cuando emite un rugido, algo que un burro no podrá hacer nunca. El rugido de sus tripas más internas para avisar a todas las fieras que deben alejarse, para avisarlas de que deben alejarse. No quiere sentir responsabilidad alguna por no respetar su territorio, ni llorará pérdida alguna por quien pretenda compartir su festín. Ruge el oso para que toda criatura acepte su sumisión, y es su voz la que emite el rugido. Es la huella indeleble que se graba en la piel del recuerdo mismo.

- El rugido del oso y el aullido del lobo son sonidos tétricos. No quisiera experimentarlos.

Cuando el oso ruge en medio de la noche la garza se ríe en el estanque. El sonido chispeante de la garza que ha sido despertada ríe y se carcajea porque está demasiado cansada como para ponerse a volar. Se ríe de sus depredadores, se ríe de todo, porque nadie se atreve a llegar hasta el río. Desde lo alto de una piedra ha encontrado una manera de ponerse cómoda, y cómodamente describe su complacencia y placidez. Emite una voz cínica e irónica, fuerte e inquietante. No es bueno reirse sin ganas, porque lo que se consigue es violar tu propia alma.

- Quizá eso sea lo que consiga por seguir tu consejo, y me fuerces a reirme sin ganas.

Si es así como te sientes súbete al caballo rápidamente, para ver hacia dónde te dirije. Déjate llevar por sus relinchos, el cabalgar en mitad de la noche, sumérgete hacia lo desconocido, cabalga hasta la extenuación. Y después, para cuando tu caballo haya dejado de relinchar, para cuando se haya dejado caer por su propio peso y esté buscando consuelo en la muerte, busca sus ojos. Y dime lo que ves.

- ¡Los tiene tapados! Ha cabalgado a ciegas, y yo no era capaz de distinguir nada en la noche.

Para relinchar como un caballo no necesitas ojos, pues la cólera viene de dentro. Siempre que nos movemos rápido lo hacemos encolerizados, como en una avalancha, para poder ver y percibir las cosas mejor. Pero para percibir mejor hay que cerrar los ojos de un camino, un camino hecho para nosotros y en el que no necesitamos medir nuestros pasos, porque ya somos expertos caminando. Para cuando ya sabes caminar no necesitas ver lo que haces por cada paso que das, sólo te queda cabalgar, relinchar como un caballo, avalanzarte a tu destino a ciegas, eso clama tu vocación..., no puedes pararte hasta que te notes muerto del cansancio.

- ¿Y eso no lo puede hacer un burro?

No. No veremos burros cabalgando como lo hacen los caballos, ni riendo desde su lugar seguro como lo hacen las garzas, ni rugiendo por su dominio y espantar lo asqueroso, ni tampoco aullando sus lamentos que se hicieron inhóspitos para su alma. El burro se lo come todo, se lo traga todo, y para cuando algo no le gusta lanza una coz.

- ¿Qué quieres decir?

No seas burro. No lances tu coz a diestro y siniestro. Te seguirán por tus coces, ganarás adeptos porque te temerán. Esa coz marcará el paso para que todos quieran ser como tú, y podrás sentirte complacido por ello. Una coz que resuene es una buena coz, pero atraerá la muchedumbre, al resto de los burros. Y te harán la competencia. No empatizarán con tus problemas, sino que te contarán los suyos. De vez en cuando te obligarán a vigilar todos y cada uno de tus propios pasos, ¡lamentable! A muchos les molestarán tus risas, quizá porque están mucho mejor conseguidas que las de ellos. Y, así, en la manada de burros todos vivirán en la más triste de las soledades absolutas.

- Ser el rey de los burros te lleva a una vida...

Una vida sin voz. Sin saber lo que es la función de vida. Sin entender de qué está hecha tu pasta. Y en el día de mañana, para cuando todo sea polvo, tus desmanes serán los motivos de la innecesidad de tu nacimiento.


Arrinconar las tablas en el ajedrez

Hay gente que se siente molesta o extraña porque el campeonato de ajedrez ha empezado con muchas tablas por parte de los grandes. Y si es algo que molesta siempre se pueden cambiar las reglas para que hayan menos tablas, para que los finales no sean tan decisivos.

Yo he versionado, para las pocas personas a las que les interese, el ajedrez de muchas maneras. Pero conseguir que a un par le interese mis replanteamientos es harto complicado. Si se cambia mucho las reglas entonces algo te tira para atrás, existe un MARCO en el idioma del ajedrez que se quiere respetar. Y eso es algo que hasta hace bien poco no comprendía. Por otro lado, si no se modifican cosas importantes del ajedrez entonces las tablas seguirán apareciendo.

Pues bien, creo que tengo una solución de compromiso:

a) Incorporar más piezas mayores conocidas. Por ejemplo, que los peones que están delante de las torres sean torres. Recuerda al ajedrez chino, donde desde el primer momento ya hay ataque y, por tanto, toda jugada puede ser decisiva para encontrar una posición ventajosa.

b) Eliminar una o dos filas del tablero. Si los peones llegan antes a su destino entonces los resultados serán más decisivos. Aunque las máquinas acabarán por tener más ventaja.

c) Incorporar la posibilidad de reincorporar las piezas capturadas. Por ejemplo, aplicarlo para los caballos. En el shogi no es muy común las tablas, si es que se producen... Esto es debido a que pieza que capturas, pieza que puedes colocar en el tablero. De ahí que siempre haya nuevas ideas para capturar al rey, con la única restricción de no poder colocar la pieza en un lugar que haga jaque o reglas así.

d) Añadir dos piezas nuevas que no rompa la esencia del juego. Como dos sotas. Donde las sotas se mueven como la dama, salvo que si son atacadas y le toca jugar al rival con la sota amenazada, entonces antes de que mueva la sota se autoinmola. Si no se quiere aumentar el tamaño del tablero entonces podrían ser los alfiles las propias sotas. Una figura que se mueva de esa manera es muy difícil de evaluar para una máquina, al fin y al cabo el concepto de sacrificio es mucho más profundo con esa pieza.

Luego hay otras formas de fomentar que en un torneo desaparezcan las tablas, esto es:

a) Con el sistema de puntuación. Donde ganar o perder puede suponer marcarse dos o tres veces más que empatar.

b) Compensando el ELO. De manera que el que gane sume mucho más de lo que pierda su rival.

c) Incorporando unas reglas de muerte súbita. Proponiendo recomponer las piezas sobrevivientes, salvo promociones reconvertidas a peon, en un nuevo tablero en ausencia de las que fueron capturadas.

d) Jugándolo a suertes. Para hacer que uno de los dos se juegue realmente un mísero punto de diferencia.

Lo interesante del juego de ajedrez es que, de alguna manera, tiene que fomentar la meritocracia. Por eso, si los mejores ven tablas puede que la manera más correcta de afrontar la situación es aceptando las tablas como la manera de interpretar el tablero. Por eso otra estrategia para eliminar las tablas es encontrando difenrentes naturalezas de tablas:

a) Se hacen tablas prácticamente en la apertura. Los jugadores no se sienten a gusto con la manera en la que han empezado a jugar, o matemáticamente el resultado de la partida no afectará al torneo. Cambia las reglas para que se deje para el final los platos fuertes y será más difícil que pase.

b) Tablas por falta de ideas. Se obtienen las tablas porque quedan muy pocas piezas y son demasiado fuertes. En principio una máquina podría calcular este tipo de posiciones para dar luz verde a "tablas por falta de ideas". 

c) Tablas por conveniencia mutua. Se deja a ambos reyes o piezas decisivas en posiciones donde la mejor jugada obliga a repetir, salvo que se quiera perder la partida. Es tremendamente improbable que esto ocurra, por lo que suena bonito ser testigo de algo tan inaudito.

d) Tablas por motivos políticos. Lo he incorporado para que cuadre bien todas las posibilidades. Si los premios por participar son cuantiosos los intereses políticos se verán amermados.

..

En cualquier caso, no es tan difícil incorporar nuevas reglas al ajedrez para algo que no nos guste se perfeccione. Por ejemplo, si se está dispuesto a romper con el marco del ajedrez se podría incorporar elementos muy impactantes de otros juegos de estrategia:

a) Capacidad para empujar o hadrar. Es decir, imaginemos que la torre es capaz de empujar o tirar de una pieza amiga o enemiga al menos una casilla si ésta está amenazada.

b) Capacidad para promocionar por masacre. Si un bando ha sido capaz de capturar 8 piezas del rival entonces tendrá derecho a convertir uno de sus peones en dama.

c) Rey paralítico. El rey sólo puede enrocarse, pero no moverse salvo una vez más. Esto destruye los finales y, por tanto, cualquier posibilidad de hacer tablas. No poder quitar al rey de una amenaza sería jaque mate.

d) Rey Chuck Norris. El rey se mueve como si fuera una dama. Pero le hacen jaque mate en cuanto le hagan un jaque y no puedan vengarse de la pieza que lo hizo en la siguiente jugada. Además de que no se puede quedar en posición amenazada.


Bueno. Si tenéis algún amigo del ajedrez le podéis dar esta entrada para que lo estudie. Tal vez haya alguien a quien le parezca bien alguno de estos cambios.

¿Os imagináis poder jugar a un ajedrez de Chuck Norris paralítico con torres hadradoras, dos sotas, con caballos reinsertables, modo masacre y con una fila de menos en el tablero?

domingo, 28 de noviembre de 2021

Algunos aprovecharemos para deshojar margaritas

Quizá no haya un buen final para estas historias. Quizá todo lo que debamos esperar no sea más que un fracaso continuo. Quizá nos toque seguir albergando dudas hasta el final, hasta el día en el que algunos de los Grandes no puedan seguir dando batalla. Pero ahí estaremos, sin saber si nuestra contribución se hizo Grande precisamente porque decía lo que muy pocos se atrevían y, al mismo tiempo, se hacía invisible porque para construir el edificio de nuestro entendimiento hace falta tapar los pilares con tabiques.

Algunos hemos estado construyendo los pilares de nuestra habla. Muchos considerarían que la manera de exponer no es más que un cúmulo de odios. Sin embargo, no hay más que mirar: si no tenemos ciertos referentes en cuenta no podremos estar seguros de que no se nos olvida algo. Es decir, podremos estar seguros de que actuamos de la manera correcta solo porque sabemos que mantenemos ciertos referentes, porque los trabajamos y los respetamos.

Hace días murió Escohotado, ok. Pero hoy me entero de la muerte de Almudena Grandes. Hay que tener ojo con todas estas cosas, porque Almudena Grandes, estando en ocasiones equivocada o no, era de las que debatían esas palabras que todos usamos. Es decir, algunos podrían estar obsesionados con utopías y otras drogas, su legado queda bastante escotado..., pero luego vemos el legado de otras personas, con novelas y artículos que usaban palabras que marcaban una generación - la conexión entre los errores del franquismo y los de hoy día. Y no es fácil ser activista por tanto tiempo.

Es más fácil ser escritor de los fuertes. Dejar que las cosas fluyan con el tiempo, mientras les sigues el juego a los dictadores, a los que fabrican el miedo. Se dedican a fabricarlo, y luego se quejan de que el odio lo generan los que señalan con el dedo dónde están esas fábricas.

Pero algunos nos quedaremos a la espera, porque el régimen ha muerto. Y ahora son ellos los que tienen miedo porque ya no pueden hacer gran cosa con esas margaritas ¿Nos teníais drogados con estas doctrinas aparentemente antifranquistas y liberales? Hacéis pasta con todo eso que sale abonando los campos en flor. Y a la gente le gusta consumirlo. No es sino más basura, más mierda para más abono.

Pero algunos aprovecharemos para deshojar margaritas. Les miraremos con crueldad hacia quienes las consumen porque no significan nada para nosotros. Nosotros les miraremos con ojos acusatorios, para que sean capaces de descubrir de dónde nacen las intenciones de dar miedo, quiénes son los portadores de odio.

Hoy habré terminado mi primera versión funcional de procesamiento de adquisición del lenguaje, y sé dónde está errado el código. Pero no pienso darme prisa. Pienso deleitarme con el tiempo porque sé que de lo que construya se formarán unos buenos pilares a partir de los cuales se deberá constituir un gran edificio. Algunos elevarán sus productos finales alrededor y quedaré muy probablemente en el olvido. Pero serán mis palabras, mis ladrillos, lo que estarán usando. Como siempre ha sido, desde el 94.

Los burgueses sólo entienden de otros burgueses. Por eso cuando ven un trabajo bien hecho se pierden en las apariencias, en el color de la pintura. Hay que aprender a llamar a lo rancio rancio, y a lo nuevo nuevo. Hay que recuperar el lenguaje de la asertividad. Y hay que decir que de todas las activistas, la persona Almudena Grandes era de las más capaces de decir las cosas más severas con la mente más serena. Algo así como: "sé que no me escuchas, pero voy a decir las cosas como son aunque no encaje con el resto del debate y lo voy a decir de manera que nadie pueda perderse en asuntos futiles". Y ahí los burgueses seguirán hablando entre ellos, cuando todo ya se ha dicho.

Ya digo que para cuando las aplicaciones exteriores derriben muros futiles se descubrirá la estructura que quedaba debajo. Lista para ser reutilizada de una manera mucho más brillante. Puede que nunca se sepa del autor de esa obra, del modelo cliente-servidor, del nacimiento del Internet que todos conocemos..., bueno, ahora se está defendiendo el metaverso, que era el modelo que yo defendí en el 94; si no funcionó quizá sea porque no fue tan buena idea. A saber.

Pero esos proyectos de adolescente ya no me preocupan. Ahora estoy con el problema de la adquisición del lenguaje y su naturaleza. Estoy consiguiendo evitar el enfoque circular, para hacer prevalecer la naturaleza independiente del individuo con respecto a su capacidad para adquirir el lenguaje. Me parece fascinante, porque en las siguientes versiones podré conformar unos postulados cuya solidez quizá se vuelva inquebrantable.

Y no me preocupa llegar a ellos ahora, o más adelante. Al fin y al cabo, ¿qué importa? ¿Acaso a alguien le podría interesar mi visión tecnológica de futuro? Estoy viejo, apartado..., no es la idea que puede tener mucha gente de alguien a quien hacer caso, o alguien de quien depender. Se asocia la tecnología con el futuro, y cada vez es más difícil configurar según qué aplicaciones - con recetas realmente enreversadas. Frameworks que exigen mucho compromiso.

Así que para cuando me toque ponerme las pilas no me será difícil imaginarme cómo hacerlo, será cuestión de ver un proyecto de futuro razonable y por el que valga la pena gastar mi tiempo.


Tierra: Día 19/07/24 punto de inflexión

Ayer se produjo el punto de inflexión a escala mundial. Dependiendo de lo que hagan y no hagan los gobiernos tras lo sucedido ayer las dos c...

Entradas populares