Este tema lo he desmenuzado en varias partes, así que supongo que esta será la entrada que sintetice todos los resultados anteriores. Si tuviera un especial interés en ir publicando mis consideraciones supongo que me preocuparía de referenciar en condiciones, pero la verdad es que, haciendo mis predicciones personales, supone un esfuerzo absurdo el plantearse algo así - no hay evidencias de que sea reconocido en vida.
Por ello, porque no tiene ninguna gracia el preocuparme por la gente ahora compilaré la idea que debemos tener sobre lo que es la gracia.
La palabra gracia adquiere muchas posibles acepciones y a la hora de hablar de manera técnica lo primero es aclarar bajo qué acepción se está trabajando: en principio, y luego se verá cómo lo ampliamos, estamos estudiando lo que hace que un texto nos produzca gracia, es, por tanto, la medida en la que vinculamos con la hilaridad un texto.
Bien podría ahora referenciar a la teoría de los tonos de un texto, cómo debe dividirse para representar frases enunciativas, interrogativas, exclamativas, etc..., pero esa evolución natural no será objeto de esta entrada.
Según lo descrito a lo largo de todo este blog la gracia se encuentra dividida en cuatro grandes funciones:
0) Morbo. Ya sea para rememorar situaciones placenteras, por proyectar maldades a terceros o sorprender mediante lo escatológico. Se trata de una gracia personal que no precisa reacción externa consciente necesariamente.
1) Chanza. Se utiliza para moralizar a las masas. La risa como mecanismo de ataque, bajo el ritmo de una fábula, rematado con la moraleja. No tendría sentido que exista la risa y persista en las especies sin este nivel de uso.
2) Interrupción. Teoría del chiste, se usa para frivolizar sobre las historias. Es un nivel superior al anterior, y parodia la ruptura del ritmo de una historia haciendo que el protagonista se vuelva torpe. Permite trabajar con varios modos y perfeccionar las historias, o la experiencia de la civilización. Puede provocar carcajadas debido a la sorpresa inherente a la ausencia de chovinismo.
3) Casamiento. Mediante ironías, metáforas y reiteraciones se genera un recurso escolástico que no afecta ni al ritmo ni al modo de la historia, sino que se queda exclusivamente en el desarrollo de la semántica, en cómo se analizan los hipomorfismos. Se puede usar como potenciador del chiste, aunque trabaja con independencia del mismo.
Vemos que cuando un texto tiene gracia es posible que haga gracia o no, pero no es posible que un texto haga gracia sin tenerla. La gracia de un texto se puede vincular con su calidad más allá del mensaje útil que pueda suponerle al receptor o al emisor del mensaje. Cuando un mensaje comunicativo tiene utilidad solo al emisor lo considero una anunciación, cuando no lo tiene ni para el emisor lo considero basura (spam), y cuando aporta utilidad al emisor y al receptor lo considero una comunicación victoriosa, pues es como cuando se inicia una batalla y se supera la adversidad. Sin embargo, no todos los textos son comunicativos, no tienen por objeto transmitir información pragmática necesariamente; si el objeto es una forma de entretenimiento, como la estética, entonces es factible pensar que el texto tendrá una enorme calidad sin aportarle nada ni al emisor ni al receptor - tan solo una agradable experiencia.
La agradable experiencia se puede convertir en una enseñanza, pero debido a que quien tiene que extraer la programación de la misma es el propio receptor del mensaje no considero adecuado verlo como un tipo de "formación". Lo educativo existe dentro de una comunicación pragmática exitosa que, además, es de una utilidad práctica en la sociedad o al individuo mismo. Si el mensaje no es exitoso la formación no tiene sentido. Por eso suelo citar a John Dewey: pues la formación debe estudiarse desde el punto de vista de la deóntica democrática, y los qualia quedan definidos dentro del estudio filológico que le demos a la descripción del comportamiento dentro de una sociedad democrática. Un ejemplo práctico sería las siete raíces de una conversación victoriosa.
La gracia, por tanto, se convierte en una manera de aceptar un texto cuando éste no tiene contenido pragmático: si el texto no sirve para nada, solo lo salva el que tenga alguna clase de gracia.
Un texto sin ninguna clase de gracia podría ser susceptible de ser considerado tóxico en la medida en la que pudiera ser puesto en substitución de información real mediante manipulación. Sin embargo, la mayoría de las censuras que se han llevado a cabo se ha aplicado en ausencia del estudio de las qualias - es más cómodo crear una institución donde unos árbitros decidirán sin rendir cuentas ante nadie. Lo que es una dictadura.
Ante la falta de mecanismos válidos que distingan las qualias de un texto para determinar su gracia y su veracidad lo conveniente sería disponer de una red social de pares donde los usuarios puedan escoger la línea editorial de lo que se puede leer en su repositorio. Sin embargo esto otro tampoco existe: los favoritos son escogidos por la administración usando una formulación basada en la aceptación de todos contra todos según el modelo creado en Redit, principalmente, por Aaron Swartz. El resultado de ese modelo es la aberración aprobada en Estrasburgo mediante el cual se responsabiliza a la red social de lo que se publique en ella - lo cual ahonda en la imposibilidad de crear una red social democrática. Imposibilidad matemática.
Por otro lado está la jugada de la llamada "tasa Google", mediante el cual se penaliza el crear proyectos como el de Redit, u otra clase de red social, al considerar que cualquier cosa que se referencie en la red social debe pagar al referenciado. El mundo al revés para mantener los monopolios y que no pueda haber avances democráticos, ni tecnológicos. La reinvención de la dictadura moderna y la censura rentabilizada.
Por ello, cuando gente como yo hablamos de que los textos tienen un límite, que la libertad de expresión debe ser regulada..., parecería que intento quitarle la gracia al arte. Como si la gracia estuviera en tener libertad por la libertad. Pues bien, se entiende por esta entrada que no es así: lo bueno es justo lo que se pretende preservar mediante la potenciación de los qualia.
Tan sencillo como que una red social como, por ejemplo, Youtube incorpore un explorador como el que tiene Windows (por ejemplo) para categorizar tus propias suscripciones y mandar a la papelera a quienes quieras. Asímismo, poder marcar entre tus subscripciones de quién fiarte para recibir los vídeos (en el ejemplo de Youtube) que te recomienden. Así, si el usuario quiere cambiar de rol podrá hacerlo eligiendo la carpeta adecuada: ganas de divertirte, formarte, informarte... Ya no digo si el usuario pudiera escoger la clase de anuncio que se va a entrometer en su equipo...
Lo dicho es impensable no porque nadie lo haya pedido sino porque ya lo he reclamado varias veces y nunca he sido escuchado - ni en el seno de los journals cuando te hacen expresamente esta pregunta.
En definitiva, desde mi punto de vista las redes sociales están diseñadas con muy poca gracia. No han evolucionado desde Swartz, sino que más bien han ido automachacándose mientras se hacían aparentemente más lucrativas. Sensación virtual generado por el fenómeno de masas y la evolución de los influencers, no por la buena gestión.
Así que si no estuviera prohibido, y tuviera una leve esperanza de que fuera atendido dentro de este fenómeno de masas, podría haber desarrollado la red social que teoricé hace..., ¿años? Ya ni me acuerdo. A mí estas cosas ya no me hacen ninguna gracia.