Todo casa

Las decisiones que adopto desde el pasado han servido para configurar un camino recto y sin callejones, sin tener que pasar por un sudor frío al tener que callar y pasar infortunios.




Puedes ser cabal en la vida, y callar porque la discreción puede ser un acto prudente. Cuando las personas se dan cuenta de que hay motivos para ser temerosos de algo, difundir una verdad se convierte en un acto temerario; sólo los valientes pueden evitar el ser temerarios al adquirir el conocimiento de causa necesario como para temer por cualquier consecuencia, y asumirla.

Han sido muchos años, y no he tenido que lamentar grandes cosas. Nada que me afecte estructuralmente. Nada que me obligue a callar. Lo que he tenido de cabal no me ha obligado a la discreción ante lo que sea objeto de denuncia.

En cualquier sistema democrático la denuncia nunca podría convertirse en un acto temerario, obviamente si el estado no es de derecho puede convertirse en una imprudencia. Entonces se justifican las máscaras, actuar desde el anonimato - como hace años, cuando aún no había pisado la universidad, una persona me aconsejó: cuando te metas en Internet que nadie sepa quién eres, cuáles son tus gustos, qué es lo que opinas, cómo piensas, dónde vives, con quién vives..., sólo deben poder reconocer el personaje que construyas para ellos.

Es la clave del éxito para conseguir denunciar cuanto quieras, como quieras, donde quieras, hacia quien quieras..., y tener el poder absoluto de una red global cedida por el mismísimo Pentágono: una BBS que englobe a todas las BBS..., Internet: una única red global.

Pero incumplí algunas normas, otras, sin embargo, las perfeccioné. Como pasa con todo, siempre hay que innovar y mejorarse. Y hay verdades que absolutamente a nadie le importa, no son objeto de denuncia. Hay verdades que en su tiempo me fueron desveladas, pero que serían relevantes varios años despúes..., así funciona el mundo de la política y de la imagen. Entré en el juego, comprendí y funcionó bien.

Ya denuncié a España a través de Estrasburgo y expuse lo que era: una dictadura institucionalista. No me hicieron caso, el juez no quiso ni considerar la denuncia. Pero las evidencias son claras: yo nunca me habría permitido el lujo de formar parte de los engranajes del sistema de seguridad sabiendo que su secreto profesional incluye el negar la incapacidad que tienen de resolver un problema; prefieren capturar a un hijoputa que se librara de los tiempos marcados por la ley, y endosarle un delito equivalente..., para luego buscar al que se librara y endosarle a él otro delito venidero.

Es así como funcionan todas las dictaduras; y las institucionalistas implican un engranje más como las cadenas de montaje: es decir, estas máquinas del fango generan en paralelo la noticia falsa, así alimentan al partisano, buscan al cabeza de turco (que ya se libró de una condena pasada por un fallo de formas), mediante el político se aviva la llama del dogma para centrar la ventana de Overton y, en ese ambiente, los servicios de inteligencia lo tienen completamente a pedir de boca: nadie les hará preguntas, como si fuera un corta-pega se dispone de lo necesario a partir de esquemas que funcionaran en el pasado.

Y luego se aleccionan a los medios de comunicación: más dinero para los que centren la ventana, más dinero para los que ataquen a los que se descentren, más dinero para crear un enemigo futil que cambie el color de las cortinas... ¿Es posible un político que ataque al stablishment? Si es mediotonto, un chovinista, entonces desde el estado profundo se le puede encandilar, se le puede regalar caramelitos, se le puede hacer entrar miedos conque ciertas cosas no se pueden hacer..., ¿cuáles son sus miedos para darle palos? ¿cuáles son sus caramelitos para que sean zanahorias? Si es medio-tonto ni se entera de que lo manipulan.

Pero sí, digamos que es al pueblo al que lo manipulan con sus ojos mágicos reptilianos, así nadie creerá a los que dicen que son esos los que manipulan a los políticos. Digamos que la tierra es plana, así nadie se atreverá a discutir la palabra sagrada de un señor que vive de las instituciones científicas públicas o de las megacorporaciones.

La plutocracia va cogiendo forma. Pero lo que hace años se podía escuchar por televisión: había que meter a alguien, dicho por El chorvo. Por el famoso caso de Alsasua..., de ahí digamos que era una secta satánica de poder que se comen a los niños y que todos los famosos están metidos, así nadie se da cuenta de que durante décadas a la policía no le había interesado meter a los criminales en la cárcel, sino generar la fachada de que el país era seguro. Nada más. Y si hay que crear un montaje, entonces tenemos a unos forenses en la lista y a otros no: los que están en la lista saben la verdad, los que no se lo hacemos todo difícil ¿Qué diferencia hay entre dos personas cabales para estar o no en la lista? Pues que a una de las dos nos consta que realmente será discreto. La otra persona..., ya se le sonsacará.

Eso significa ser cabal. Significa que no te pueden manchar. Significa que sólo porque veas algo que se debe denunciar no tienes porqué hacerlo público, pero si viviéramos en un estado de derecho al menos podríamos denunciarlo públicamente - sin máscaras.

Gracias a que me he mantenido en un estado de trabajo sin privilegios, que he antepuesto el rechazar cualquier puesto no bien explicado, el rechazar cualquier puesto demasiado ligado a la dictadura intitucionalista, al engaño, la máquina de crear noticias, etc..., poco a poco he visto que mi instinto no me engañó. Independientemente de que me sienta invulnerable: ya he publicado, en esencia, el alma mater de la tecnología que quería divulgar. Sé que lo que me quede por publicar en esa lista que me parece interminable podré tomármelo con más calma..., al menos hasta que cobre - pero de verdad.

Se supone que iba a cobrar por mis contribuciones a la publicación, primero esperar hasta el día 14, luego se recalculó para el 23..., ahora veo que lo han desplazado hasta el 30 de junio. No tengo ni idea de porqué esas demoras. Pero puedo esperar: que se sume con los beneficios del mes de Junio, bien, así podré especular sobre mis aportaciones, mi tiempo, si vale la pena... Aunque por el momento no sé si me toman en serio.

No hay que olvidar que me ofrecieron ser un colaborador de una publicación técnica y, en cuanto les mostré un resumen de mis titulos..., no me respondieron ni para decirme que ya no estaban interesados. Ni para adelante ni para atrás. Lo mismo con el dinero en efectivo: ni me lo dan ni me lo dejan de dar.

Así que no hay nada tangible. Igual que tampoco veo que mi vida en sí tenga futuro. Sea como sea será interesante descubrir...., qué pasaría si publico en Medium, ante cientos de personas, esta misma historia - con mi nombre y apellidos... Una continuación lógica a mis críticas a la plutocracia podría ser una exposición de sus vergüenzas... No sé. Aún lo tengo que ir pensando: ¿cómo lo voy documentando? ¿De qué manera ir enlazando todo?

Bueno, pues marcamos este día y veremos lo que pasa.