La llamada a la aventura

Sé muy bien lo que he de hacer y, aunque me lo puedo tomar con más calma, prefiero ir divagando y lanzando misivas a partir del punto de inflexión: Proudhon. Así aprovecho para criticar el anarquismo desde el punto de vista de un informático del siglo XXI.


Ambiente

El Panfleto I.

Podemos volver atrás en el tiempo y buscar el secreto del éxito de las más grandes revoluciones de nuestra época más moderna. Para cada grupo exitoso siempre existía otro grupo que se le oponía. Considero que es inevitable encontrarse con la oposición firme, tanto desde arriba (el estado) como desde abajo (los golpistas). Un sistema inteligente es el que asume esas contrapartidas hasta el punto de tolerar la derrota como una fase más, como un estado transitorio.

Ése, empero, siempre ha sido el primero de los errores que han cometido todos los revolucionarios: querían que lo suyo fuera para siempre. Y se les olvida que la palabra siempre es perfecta, y los actos no. Nada es para siempre. Es por ello que la revolución es un acto que puede cambiar muchas cosas de manera permanente, pero lo que quiera que cambie de esa manera no estará en la mano de las personas que la integren.

De ahí mi primer postulado:

1. Todo acto que pretenda llegar para quedarse debe partir de la premisa de que sus propuestas son temporales y asumir la posible derrota u olvido de las mismas.

Bueno...., creo que ya estoy empezando. Que sirva o no para algo, ya veremos. No quememos los barcos como Hernán Cortés, salvo que queramos morir en nuestro sueño Dorado. Nadie puede distinguir un criterio objetivo de un delirio, y es esa la razón por la cual es nuestra obligación asumir un plan B allá donde, objetivamente, haya fracasado la primera intención.

Pero antes de empezar a tocar de manera profunda estos temas, quisiera divagar un poco con lo que me dice la experiencia..., ¿cómo debemos afrontar la Revolución y cuál es la naturaleza de su legitimidad?

Para empezar considero que no hay mayor revolución que salir del nido: así pues, si disponemos de mi teoría del género único, significa que una Revolución es una historia formada por los arquetipos del Héroe de las mil caras, de Campbell.

Así que mi segundo postulado, para conformar una teoría social completa sobre cuál es el plano general sería:

2. Una Revolución es un arquetipo de historia donde sus integrantes son los héroes de las historias que son un éxito en la literatura que conocen.

Sé y me consta de que cuanto más contenido le meto a estas entradas menos desarrollo le doy a cada postulado. Es hartamente complicado saber hasta qué punto debe ser depurable incluso las reglas arquetípicas que estoy acordando. Así que haré un alto en el camino y hablaré del 15M para desarrollar, justamente, la primera de las partes: la llamada a la aventura.

¿Qué fue lo que provocó el éxito del 15M? La mayoría de los que lean a partir de aquí dudo que quieran seguir leyendo tras observar una síntesis demasiado explícita (overfitting, en terminología deep learning), pero realmente creo que debo apostar más por la densidad y por la esperanza de que quien me lea tenga fe en alguien como yo. Que sea o no mi tiempo lo considero ya irrelevante.

Para entender el éxito de la convocatoria del 15M debo retomar a los años zapateriles, cuando los jueces revolucionaron la imagen de sí mismos y acabaron cumpliendo un principio que se estudiará en todas las universidades: una democracia se consolida a partir de la independencia fáctica de los jueces hacia los poderes públicos.

En cuanto aparecieron un cúmulo de casos de corrupción y más chivatazos provenientes de gente anónima (gente que trabaja o trabajaba para el poder), emergió el trípode imprescindible para lanzar la llamada.

1. Motivación. Casos de Corrupción. Los jueces denuncian las estructuras del sistema, sabiendo que al principio aún los políticos seguían siendo bien vistos pero, con la acumulación de más casos, poco a poco la sociedad fue tornando la imagen que tenía de ellos.
2. Agenda. Meneame. Desde una copia barata de reddit, se fueron mostrando los noticiables para dar cobertura a las páginas donde se desarrollaban foros que reclamaban soluciones: una llamada a la aventura desde el cubículo de los foros de opinión.
3. Logística. Universidad. Desde una universidad donde se estudian ciencias políticas se estuvo instigando a que los estudiantes teorizaran sobre la posibilidad de una revolución ¿Cómo debían movilizarse? ¿Dónde? ¿Qué es necesario para revolucionar?

Desde mi ordenador podía meterme en los foros y ser de los primeros en opinar y darles el apoyo básico a los que promovían el juntarse. Hay que decir que los postulados que he estado mostrando en este blog fueron aplicados entonces: desde este primero postulado, pasando por el cálculo adecuado para transmitir la solución justo cuando la gente lo pidiera en el blog oportuno, etc... Es decir, nada de lo que he escrito en este blog es exclusivamente teórico. En algún sentido puedo hacer referencia a situaciones prácticas.

Para cuando la gente se reunió, el proceso logístico supongo que estuvo fundamentado en cómo teorizaban los alumnos a la hora de buscar financiación, primero entre sus profesores, y luego abriendo el abanico hacia las distintas empresas, que estaban llenas de indignados. Esa parte la conocí menos. Mi función, en esta historia, fue la de convertir en extremistas a un grupo (una historia larga..., ya ni me acuerdo del nombre del grupo y, total, luego estuve intentando evitar que nos cruzáramos las miradas) para que luego ocuparan el lugar logístico y delegaran la agenda a los que llegaran con sus propias motivaciones..., es decir, el trípode tenía que rotar para que funcionara una vez reunidos.

Así era como tenía que conformarse la agenda. Y, de hecho, al día siguiente aparecería yo y..., ¿no hay nadie? Pregunté aquí, allá... Volví a Cartagena extrañado pensando que el 15M fue un fracaso absoluto, sin saber que la policía había cargado por completo y que me habían engañado al decirme que ellos se habían ido por su propio pie.

Esa era la función del antagonista dictatorial. Una democracia no miente. España miente, por tanto no es democracia. Los principios rectores que tanto repetía se volvían a reproducir y, cada vez, más gente estaba convencida de que estaban luchando contra un estado opresor. La razón es muy simple: sabía que si les dejaban quedarse entonces moriría el concepto, por eso quería estar ahí y dar mi apoyo. Sin embargo, como el éxito fue tan rotundo, y los antidisturbios están tan irregularmente pagados, al final la cosa se resolvió dándoles más motivos para desobedecer y reclamar un país democrático.

Las tesis que sostienen algunos periodistas que son completos imbéciles es que este país es una democracia. Si lo fuera, entonces se darían alternativas representativas de la moralidad que subyace de esos movimientos. En Cartagena, en cuanto aparecieron las alternativas a no tener que dormir en la calle, la gente dejó de ubicarse como opositora del régimen, y tampoco encontró su espacio opositor al sistema. Es decir, la mejor jugada para el dictador es ofrecer perspectivas democráticas al disidente. Y parecerá una broma, pero no: es así.

Con la aparición de nuevas formas de aberración en cómo dirigir a las fuerzas del orden algunas fuentes anónimas empezaron a filtrar información sobre Cifuentes..., pero claro, esas informaciones, nos cuenta la historia, hay que guardárselas para cuando más duela.


Mi idea, a la hora de visitar el 15M, era reaccionar ante la negativa a la llamada, esa era la función que no sabía si se debía resolver. Pero está claro que si hay que esperar a que los perros hablen, que lluevan ranas o cualquier cosa sobrenatural, entonces muy difícilmente, como decía Proudhon, podremos presenciar un cambio.

Es por ello que, ¿qué se entiende como una ayuda sobrenatural? ¿Podría que se espera a un informático que sea un genio y ya tenga preparada una teoría de colas que organice un sistema autorganizado? Esos grupos los he estado conociendo a lo largo de los años, pero no me ha gustado su alto nivel de altruismo..., parecen hipis... ¿Deberé tragarme lo necesario y negociar con anarquistas?

En cualquier caso los mandé a paseo por cómo leían mis documentos de informática. Ya veremos...., pero es necesario por encima de todo una depuración científica y una revolución técnica. Sin dogmas, ni ideologías. Sin creencias de un mundo mejor, ni tonterías por el estilo. La ayuda sobrenatural es la fórmula que debe responder a la negativa de la llamada, y ésta no puede ser quemando las casas o destruyendo las empresas. Esos mecanismos contradicen el primer postulado. La ayuda debe ser exclusivamente basada en el egoísmo puro. No hay otra.

Y, como pasa siempre, cuando tienes las especificaciones y tienes al informático, al final también tienes los esquemas. Y, con los esquemas, el croquis de lo que hay que hacer.

¿Queréis un milagrito? Hasta Abril me sobra tiempo.


La entrada me ha salido larga ya, ya continúo otro día.