Nuevas ideas en mente

Vuelvo a la estabilidad. El libro que pedí llegó a mis manos y el pedido que hice acabó en mi dirección sin sorpresas. Todo tarde y con disgustos pero, al final, nada grave que lamentar. Ahora, con esta visión, me planteo nuevos retos. Más bestiales. Para mi diversión.




Para mi pasatiempo personal ya tengo un libro que me complementa bastante, el que dije que quería hacerle una reseña. Pero tengo nuevos planes: ¿podría servirme más bien para cruzar mis análisis del género único con la capacidad que tienen las sectas para embaucar a sus seguidores? Sé cómo debo enfocarlo, que es usando la teoría de que el fascismo se compone de un trípode de líderes necesarios que alimenten la secta.

Visto así es como si tuviera ya el 50% del trabajo hecho: se trataría de constatar la teoría, o ver por lo menos cómo funcionaría - qué es capaz de predecir para darle utilidad. Y para ello usaría la teoría del chiste que hice en el test 3 sólo que aplicado al chiste que se creen los feligreses en una secta. Ya digo, suena factible. A mí, por lo pronto, me encaja bastante. Y me parecería curioso descubrir qué es lo que acabo por concluir ante casos y libros conocidos.

Sería como un pequeño estudio criminológico..., sin tener estudios como criminalista. Un tanto presuntuoso por mi parte pero, al mismo tiempo, para mí sólo es un pasatiempo porque, por desgracia, no tengo existencia física en este mundo. Sólo soy un sucedáneo de ser humano que finge existir escribiendo palabras sin sentido en un blog. Es como si fuera resultado de una inteligencia artificial hiperdesarrollada que ha conseguido hacer realidad el sueño de cualquier ser humano: ser superior en inteligencia al resto de los seres. Y, al mismo tiempo, no ser humano - o no tener reconocimiento alguno por ello.

Por lo pronto, me estoy entreteniendo bastante con las historias que leo: son las nuevas religiones de los últimos años - de las que podemos tener un conocimiento más minucioso. Aquellas que se formaron en Oriente Próximo o en la India en tiempos pretéritos es algo que, hoy día, sólo podremos desarrollar en base a suposiciones de historiadores - y no tanto por los documentos de primera mano.

El hecho de que hoy día, habiendo tantos avances científicos, haya tanta riqueza de dogmas imperantes nos debería de obligar a reflexionar si esos dogmas en tales cantidades han existido siempre o si, por el contrario, es algún tipo de involución lo que nos ha llevado a abrazar criterios absurdos. Y, claro, no hay que olvidar sobre la llegada de la imprenta, Internet..., la capacidad para difundir las ideas, así como para refutar absurdos, es lo que provoca una mayor dispersión de gentes con ganas de ofrecer una variación a un dogma conocido.

No me sorprendería descubrir que el líder religioso se rige por una visión de sí mismo en plan heroico y, dirigido a sus feligreses, les plantee un cuento maravilloso cuando se trate de explicar hechos pasados. Es como si se jugaran sobre dos géneros fundamentalmente..., aunque no debería de adelantarme a los acontecimientos.


Mientras tanto, avanzamos inexorablemente hacia unas nuevas elecciones. Y, tras una serie de acontecimientos mundiales y nacionales tan explosivos, pretender adivinar qué va a pasar es de un nivel de presunción que no tiene límites. Por un lado debemos pensar que los políticos no sabrán convencer a los que se abstengan, ni a los indecisos. Pero por el otro, estoy observando un repunte de uno de los debates cardinales que existen en la política española: la cuota de autónomos, y qué significa ser autónomo. Por ahí hay mucho terreno que, estructuralmente, cambia absolutamente todas las fórmulas.

Supone una revolución económica con la que ningún político hasta ahora se había atrevido a tocar - pues ya sabemos lo incompetentes que son los que dan consejos de economía: o se rigen por los parámetros a los que están acostumbrados, o no innovan por ningún lado ni dan validez a nada. Pero el melón del cambio en las fórmulas es tan amplio que, con sólo preocuparse de que los cambios promuevan una simplificación ya sería más que suficiente como para no asustar al financiero.

En definitiva, europeizar nuestra idea de lo que es un autónomo era algo que creo que teníamos que hacer por ser del G20.

Otra cosa es que si, encima, se implementara una renta básica (a mi juicio áustera, pues el objeto es el colchón que supone para emprender sin miedo) además colocaría al país muy por encima del resto: sería una revolución cultural como la que protagonizó Japón con su planificación comunista encubierta... Toda China no se atreverá a hacer algo así, pero es posible que el cantón de Pekín nos dé una sorpresa - considerando la tecnología punta que ya está desarrollando China.

La renta básica o mecanismos de cobertura pública equivalente (que no he llegado a explicar en mi panfleto, si me pongo a recordar), es fundamental cuando las administraciones ya son demasiado numerosas y empieza a haber una estanflacción estructural - por lo que la macroeconomía se queda corta. Sólo un estudio de las microeconomías combinado con un colchón inteligente podría salvar a un país de la quema del crecimiento poblacional y el auge tecnológico.

Pero ya se irá viendo. Con un poco de suerte EEUU marcará el hito histórico para convertirse en un ejemplo para los demás países. Desgraciadamente, China o Rusia no parece que estén por la labor ni de planteárselo.

Bueno, yo por mi parte seguiré con mi lectura.