viernes, 24 de mayo de 2019

En un extraño vacío

Ganando y perdiendo lo mismo. Pero en esta ocasión me veo ocupado por un objetivo que aún no sé si me va a servir de nada.




Me planteaba publicar, pero algo me detuvo. Cuando publiqué un par de conclusiones muy simples sobre cuadrados grecolatinos, los expertos me lo monetizaron. En cuanto publiqué un grupo de teoremas (o tesis para los no crédulos) para definir un álgebra, ahí callaron. Y no les culpo, no es tan tangible como el primer artículo. De hecho, es tan peculiar que incluso podría parecer que podría fallar con mucha facilidad.

Y no les culpo: ¿cómo van a testear todos los posts arduamente? No tienen porqué. Pero claro, aún me queda ese resquemor: ¿para quién estoy divulgando? ¿para mis cuatro fans?

Tampoco sé lo que pierdo por publicar verdades que les resulte pesado constatar. Y es que está claro que mi política debería de ser otra: como reservarme lo más difícil para quien quiera leerlo. Para algún link a parte - o algo así.

En lo que se refiere a la divulgación, las técnicas no son las mismas que cuando se practica la edición de ensayos. Eso estaba claro. El artículo que escribí sobre la pragmática era, por el final, demasiado específico y pretencioso como para que quieran aceptármelo sin más.

He descubierto a uno que me ha aplaudido mi trabajo sobre estadística clásica. Veo que ve las cosas como yo - pero tampoco me lo han monetizado.Y es que debo pensar en el futuro: no puedo dedicarme a lo que me dedico, así que si mi tecnología fuera reconocida es posible que gane algún premio o me den alguna clase de trabajo que me dé estabilidad. Pero si sigo siendo desconocido, con una tecnología cínicamente no reconocida, lo me quedará será esa monetización sobre los artículos que denuncian tales actos perversos por parte de la sociedad. Y en esto tampoco me puedo quejar.

Son dos escenarios posibles, dado como están las cosas. Pero no me puedo permitir de jugar a una sola carta. Prefiero atacar en todas las bandas, y es posible que los expertos se cansen de mí en cuanto publique cosas demasiado..., raras. Puede que en un momento dado decidan que ya me he pasado demasiado de listo como para que me acepten nada. Si pierdo mi credibilidad, eso será mi muerte.

Y eso me lleva a que la tecnología que tengo puede que exija demasiado trabajo para corroborarla..., o no. En cualquier caso, si me da por hablar del cerebro humano es muy probable que me vayan cogiendo manía paulatinamente.

Hace tiempo le propuse a un youtuber que echara un ojo a mi página de "lucesyespectros.blogspot.com.es", para que la leyera un poco y me diera su opinión sobre lo que ahí pongo. Me respondió que a su juicio lo que escribía era todo sugestión. Y la verdad es que me apenó: era su opinión, y además una opinión consolidada. De ahí ya no podía salir, porque había emitido un juicio - pero sin desarrollar. Y eso no me valía. Pero claro, tampoco este hombre estaba obligado a hacerme un análisis profundo, las cosas como son.

Un tiempo después vi cómo este hombre erraba en una descripción sobre la mecánica cuántica (al no reconocer la paradoja EPR como un efecto científico demostrado) y, a pesar de que yo ya había participado en foros de física, lo único que se le ocurrió decir fue que si un físico me escuchaba decir las cosas que decía se partiría el culo (o algo así, no me acuerdo lo que dijo exactamente). La cosa era que no solo creía que me equivocaba, sino que se creía en situación lo suficientemente válida como para asegurar que los términos que usaba eran demasiado fantasiosos..., y se equivocaba. Pero claro, ante él yo era otro new age.

Y ese es el problema ante el que me coloco con los expertos. Podría perder mi credibilidad exponiendo artículos demasiado complejos como para que no quieran comprobarlos, con todos los motivos del mundo, sí, pero perdería mi credibilidad. Y claro..., aunque yo sea culpable de ello, en lo que se refiere a echarles las culpas a lo que sea, eso poco importa, lo único que me importa es saber cuál es el siguiente paso certero que debo dar. Al fin y al cabo, lo que para mí es puro caviar para ellos no es ¿calidad?. Lo que para mí es una trivialidad, ellos sí reconocen la parte innovadora y tangible ¿Acaso soy demasiado grandilocuente? ¿Un creído?

Bueno, para ser un creído tengo las máquinas y la tecnología. Tengo las predicciones de por dónde debe continuar las cosas. Tengo la capacidad para leer esa tecnología; tanto la mía como la de ellos ¿Debo bajar un poco más a la tierra? ¿Debo revisar los documentos conexionistas de la informática para empaparme aún más en su terminología antes de insinuar nada? Esa terminología se prolonga hasta la exasperación..., y conocidas según qué técnicas algunos términos podrían quedarse incluso hasta obsoletos. Pero mejor no me atrevo ni a insinuar algo así. Hay que ser inteligentes.

Pero yo no soy inteligente. Sólo soy un genio. En una sociedad corrompida lo inteligente es dejarse llevar, surfear entre la indolencia de la mala fe. Negarse a la autoinmolación de las buenas formas, el martirio de pretender ser sincero contigo mismo y con los demás. Cuanto más puro tenga uno el cuerpo y el alma, mayores máculas y cicatrices le espera en su mundo exterior. Dame a la persona que no haya sufrido percances externos y te hablaré de jóvenes que crecieron en una incubadora. Poco criterio podrán tener para ayudar al resto. Poca fuerza podrán tener sus manos para dar, para cambiar las cosas.

Caerán las horas y buscaré otra forma de decir lo que digo, de plantear lo que sé. No hay otra.




No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tierra: Día 19/07/24 punto de inflexión

Ayer se produjo el punto de inflexión a escala mundial. Dependiendo de lo que hagan y no hagan los gobiernos tras lo sucedido ayer las dos c...

Entradas populares