Estaría bien poder evocar a mi entrada sobre las religiones, cuando hablaba sobre la Incontinencia del Poeta. Pero es que las religiones se generan mediante un proceso constructivo y otro destructivo, así como ocurre con cualquier forma del lenguaje - según he estado indagando en mis estudios sobre adquisición.
Lo que más creo que se distingue en la máquina programada bajo filosofía conectivista de cómo es un ser humano y cómo entiende él el lenguaje adquirido consiste en que la máquina aprende la gramática y sus metarreglas al mismo tiempo, mientras que el humano aprende cómo funciona la gramática a posteriori. Es decir, el que sabe hablar bien no sabe porqué o cómo se habla bien, pero lo hace. Mientras que las máquinas, hasta el momento con los procesos enseñados por Early y derivados, cuando aprendían el castellano, o el inglés, automáticamente se conocían la estructura gramatical - todo a la vez.
Si a un niño le oyes hablar bien en castellano luego no le puedes acosar con cuál es el sujeto o el predicado de la oración, es posible que los use correctamente sin haber aprendido qué es sujeto y qué predicado. Sin embargo, con las técnicas que me enseñaron en la universidad, con lo que leemos en los libros, parecería que lo que hay que hacer a los niños es enseñarles gramática - para que aprendan a hablar bien. Y eso no es correcto.
Para aprender a hablar bien un idioma hay que leer, o usar, el idioma. Internamente la cabeza se encarga de ordenar las estructuras y sus frases hasta conformar un sentimiento o sensación de que todo es correcto. Esa sensación tiene que ver con la eficiencia del lenguaje, con una idea pragmática sobre la capacidad para expresar las ideas y las emociones valiéndonos de la mayor calidad posible. Es así como lo interpreta Grice, y bajo esta doctrina podríamos ver que sólo podemos seguir consolidando las ideas.
Sin embargo la creencia de que un niño aprenderá a hablar mejor cuanto más reglas gramaticales les enseñen es un error. El escritor aprenderá a escribir mejor, sí. Pero quien está adquiriendo el idioma necesita como técnica reconocer las calidades de la pragmática. Y la mejor forma de que aprenda a aprender esas técnicas es dándole un uso al lenguaje: convirtiéndolo en un instrumento de un conocimiento evaluable, o útil.
Pero no quería hablar de filología. Este post va de política.
Cuando a un ciudadano le ofrecen dos opciones a elegir no siempre se da cuenta de cuál es la mejor. Más en concreto, existe un dilema de cargar más hacia el paternalismo o hacia la independencia en lo que se refiere al papel que debe ejercer alguna institución o poder. Pero lo curioso es que en cuanto se le da la opción de decidirlo todo con urnas automáticamente le parecerá bien, es como el remedio de los tontos.
¿Quién debería de decidir que un avión se ha salido de su ruta y no está reaccionando a los protocolos de aviso?
- Un ministro. Una persona que tenga que responder ante las urnas. Un político de derechas/izquierdas que represente a la ciudadanía.
¿Esa es la respuesta más inteligente? El hecho de que la gente no se cuestione algo así es lo que me induce a pensar que tenemos un serio problema.
¿Qué problema habría conque los militares se activaran gracias a un protocolo aceptado por los legisladores, representantes del Pueblo?
- No, jamás. No podemos permitir que los militares tomen el control. Tenemos que vigilarlos. Un político debe ser el que les dé permiso para actuar.
¿Y todavía se preguntan porqué los socialdemócratas tienden a la idiocracia?
El socialdemócrata tiene lo peor del socialista y lo peor del capitalista. Primeramente voy a centrarme en qué significa ser socialdemócrata: es el sujeto que defiende que los partidos políticos deben tener el control del estado porque son éstos, junto con los sindicatos, los únicos que pueden llevar al Pueblo al Pacto Social.
Lo que se le olvida mencionar al socialdemócrata es que los partidos y los sindicatos dentro de un modelo capitalista son subvencionados por las empresas, y que cuando están en el poder aprovechan para gobernar y hacer propaganda de sus funciones. De la misma manera los medios hacen propaganda de los partidos en la oposición durante toda la legislatura. Por esa razón es más fácil financiar a sólo dos partidos políticos, para que se vayan sucediendo; y en todas las socialdemocracias a lo largo de la historia y en todo el planeta siempre se ha sucumbido al bipartidismo. Cuando la fórmula socialdemócrata desconfía de esa manera de hacer las cosas: su fórmula no incorpora mecanismos contra los monopolios bipartidistas - monopolios de ideologías que lleven a las personas al extremismo y a comportamientos bipolares.
No seré el único que mencione los errores de la socialdemocracia, de cómo siempre es un gabinete el que acaba controlando todo - como pasó con Stalin, Mussolini, etc... No pueden tener apariencia de partido político democrático, o propaganda de ello, pero cualquier analista se da cuenta de que es una farsa.
Ante lo cual, no faltará el analista que diga que es lo único que hay, que no se puede aspirar a más..., que o son las urnas o es la dictadura, la tiranía, la anarquía y el caos, etc...
Nos imponen unas fórmulas absurdas que son fáciles de substituir, y la gente traga: el demócrata sabe que no tiene peso, que sus representantes van a su bola, que son corruptos, que no tienen nada que ver con el Pueblo..., pero tragan. Todo lo más se abstienen de votar, pero para eso está la campaña electoral: para hacer ver que sólo hay dos tipos de votantes, los de tipo 1 y los de tipo 2. Y que si no participas entonces no tienen derecho a quejarte. Claro..., aquí todos somos idiotas.
Es terriblemente sencillo activar un modelo asambleario. Y terriblemente barato. Pero una y otra vez se repite la misma cantinela:
- ¿No tendría que ser un político el que determine qué jueces pasan a ser magistrados?
Y siempre surge la misma duda, ¿qué problema tienen conque los jueces promocionen a los jueces? Tan pronto como te dicen que no se puede ceder el control de la firmeza a los jueces les recuerdas que debería de activarse por fórmula la opción de referendar una sentencia para anular la firmeza de la misma, que el Pueblo debería de poder revocar una decisión que no comparte unánimemente... Pero esa parte es en la que se vuelven de nuevo sordos.
- ¡Y el juicio de Sócrates! Ay de él, no podemos dejar que el Pueblo decida, hay que vigilarlos...
¿Acaso estuvieron en ese juicio? Sócrates fue condenado muy probablemente porque fuera un salido, cosa que no querrán confesar sus dos historiadores - el más afín y el otro que podría ser como afín. Parecería que por tener que tragarnos la propaganda de un juicio interpretado por S. Agustín ya estamos condenados a no culminar la orgánica democrática. Le añaden posiciones innecesarias, y aspectos absurdos que generan corrupción.
Si decimos que los políticos son corruptos entonces lo que falla es el cargo en sí. Hay que eliminar todo el poder que le otorgamos al político. Si el poder recae sobre una cámara entonces la corrupción se hace más difícil, o más fácil de controlar.
Por eso fingen que la Constitución Española obliga a que tenga que formarse un Gobierno, lo cual es mentira. El Gobierno de España es un claro ejemplo de la mentira y el sometimiento al que tiene que enfrentarse los demócratas: el Pueblo tiene un marco que le permite activar su democracia, pero elige las urnas. Elige una y otra vez la mentira: como si realmente el poder ejecutivo fuera necesariamente el catalizador legítimo de la democracia a través de los partidos políticos.
Es algo que siempre observé: cada vez que discutía con unas personas y tenía la oportunidad de hablar yo y desarrollar porqué se equivocaban alguien me interrumpía y decía "¡votemos!". Oye..., ¿y mis razonamientos qué? ¿No tengo derecho a ser escuchado? ¿Y si la lógica prevalece por encima de la impresión general? El problema es que antes de decidir estar en contra de algo hay que tomar en cuenta todas las valoraciones.
Esto mismo me ocurrió en el 15M: una perturbada no paraba de acosarme conque tenía que hacerle caso, y yo lo que quería era hacerle una pregunta al de respeto..., ante lo cual él me decía que tenía que hacerle caso a la chica en cuestión. En cuanto le respondía otros saltaban y decían que si el de respeto estaba de acuerdo con ella..., ¿y a mí qué? ¿Yo quería hacerle una pregunta al de respeto? ¿Por qué tengo que definirme políticamente? ¿Acaso se me niega mi derecho de petición por mis ideas políticas? Así que cuando el cargo toma una decisión dictatorial no es de extrañar que acabe ocurriendo lo que le vaticiné al de respeto: "estás desmoralizando a la gente con tu comportamiento". Así hasta que no aguanté y me marché, y abandoné ese movimiento de mentirijilla.
Lo mismo ocurre con esta falsa democracia: ¿si participo y voto tendremos democracia? Al revés, por participar no tenemos la oportunidad de que se redacte una Constitución del Pueblo. Reclamo un proceso constituyente que excluya de la Constitución cosas que nunca hemos necesitado: y lo que necesitamos es que se active el debate, porque las urnas es la incontinencia del demócrata - es la excusa que necesita para sentirse poderoso, cuando en realidad no es más que una víctima de las masas bipolarizadas.
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