Un nuevo recurso literario

Hace tiempo lo estuve pensando. Los primeros capítulos del libro fueron borrados por culpa de hackeos del Windows..., así que aprovecharé para replantearlo de otra manera. Quizá lo desarrolle como un juego de rol; ya que ése era el concepto original. Aunque ya nadie juega a esas cosas.



Estoy dándole vueltas..., el poder que haya podido llegar a tener ya es cosa del pasado. Todo cuanto voy a ser capaz de aportar se reduce a lo que otros puedan ver con mis ojos. Es muy probable que intente colarme en uno de esos concursos para capturar talentos programadores pero, siendo yo tan viejo como soy, dudo que sirva absolutamente para nada.

Mi historia se reduce a todas esas personas a las que ayudé para que, siendo poderosas, pudieran ser aún más poderosas todavía con el fin de que sirvieran de ejemplo para toda la humanidad. Visto cómo están influenciando algunos a que haya guerra en Venezuela me imagino que el mundo no está siendo mucho mejor..., en cualquier caso hemos pasado el punto de inflexión del 28 de Febrero, este mundo aún puede tener arreglo.

Mientras, me vuelvo más literario, más artístico..., menos técnico. Quizá me desquite a través de la literatura.

Ya me lo planteé: cómo sería un mundo donde todas las formas de magia fueran posibles, donde cualquier cosa tuviera sentido. Ya no explicar científicamente las criaturas mágicas, pues eso es problema de biólogos, sino justificar la existencia filosófica de cada una de las criaturas, llegando hasta el punto de que, con la existencia de los dioses, habría que sancionar el problema del mal.

Efectivamente, un juego de rol donde eliges cualquier enfoque de cara a las ánimas, cosa que ya tengo preparado. Para así aparecer en el mundo real: el mundo astral y, a partir de él, explicar el mundo terrenal.

Se trata de un ejercicio mental, puramente ideológico, que intente aunar todas las mitologías, de dar satisfacción ecléctica a cada una de las supersticiones antes de determinar si habrá un panteón o un monstruo espagueti. En cualquier caso, nada puesto ad-hoc - todo con su peculiar sentido dentro del engranaje del sentido que le da cada personaje a su propia vida.

Entonces reaparecerían las típicas historias y se podría observar cómo se crean las aventuras en esos juegos. Dentro de la trama principal, pensé, el objeto sería resolver un complejo por el cual se rescata una figura que ha sido condenada: la clásica entrada en la mazmorra. Y, al salir de ella, descubrir que la trama marco de estas aventuras es otro juego, pero basado en la administración de los recursos, los equipos y sus misiones.

En este juego encontraríamos minijuegos, como puzzles, que darían diversidad y un poco de magia al juego. De la misma manera habría una puerta al mundo mortal, donde se podría seleccionar a un nuevo personaje que hubiera superado algún arquetipo adecuado, de la misma manera que puede ser interesante negociar con otros personajes del mundo astral.

Ciertamente hablo de un juego muy innovador pues, entre otras cosas, estoy pensando en que se juegue sin dados: que todo se resuelva mediante la negociación entre jugadores y máster. Y, peor aún, que el máster sea hartero..., y haya unas reglas de competición como en un wargame.

Este nuevo recurso literario ya lo discutí hace décadas con mis antiguos compañeros de instituto..., gente con la que ya no me hablo - ni me dirigirán la palabra. Es el recurso del fatalismo: algo que no se ve en las historias, todo lo más se ha encontrado algo parecido en las series más modernas de TV como Juego de Tronos o en películas sueltas..., según el caso, todas las reglas que suponen la liberación de una fatalidad exige pasar por el riesgo de asumir una fatalidad mucho mayor.

Este recurso tiene lecturas intensas cuando se saben colocar en los lugares adecuados. Que son los lugares que marcan el desenlace de una historia heroica o el comienzo de una historia maravillosa. Cuando estas historias están bien constituidas las aventuras se juegan a golpe de fórmula matemática, y el tiempo se vuelve una ilusión.

Supongo que redactaré las reglas y las subiré..., en el peor de los casos servirán para hacer videojuegos.